El agua puede parecer simple y transparente, pero cada gota contiene una huella única de minerales que definen su sabor, sus beneficios para la salud e incluso su interacción con los electrodomésticos. Comprender la composición del agua no es solo tarea de los científicos: es un paso importante para garantizar una hidratación segura, equilibrada y de alta calidad para la familia.
¿Qué hay en el agua?
El H₂O puro rara vez existe en la naturaleza. A medida que el agua fluye a través del suelo y la roca, disuelve minerales como calcio, magnesio, sodio y potasioEstos minerales determinan si el agua es “dura” o “blanda” y dan forma a su sabor y valor nutricional.

Minerales clave
• Calcio – Favorece la salud de los huesos y los nervios; reduce la corrosividad del agua.
• Magnesio – Aumenta la energía y la función muscular; contribuye a la dureza.
• Sodio – Regula los fluidos corporales; su consumo excesivo puede elevar la presión arterial.
• Potasio – Favorece el funcionamiento del corazón y de los músculos; generalmente en cantidades mínimas.
• Hierro – Vital para la salud de la sangre; demasiado provoca sabor metálico o manchas.
Estos minerales pueden ser beneficiosos para la salud, pero sólo dentro de límites seguros.
Efectos sobre la salud
Un contenido moderado de minerales puede beneficiar al organismo. Por ejemplo, el calcio y el magnesio fortalecen los huesos y los músculos, y el agua mineral equilibrada puede reducir el riesgo cardiovascular.
Sin embargo, Demasiados minerales hacen que el agua sea “dura”, La formación de cal y la alteración del sabor. El exceso de sodio o hierro también pueden causar problemas de salud o domésticos.
El lado bueno
El agua rica en minerales tiene un sabor más intenso y refrescante. Favorece la hidratación y aporta un sutil valor nutricional.
Sin embargo, el equilibrio es clave: más minerales no siempre significa mejor. La proporción adecuada proporciona buen sabor y beneficios para la salud.
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En algunas zonas, el agua puede contener un exceso de minerales debido a la geología o la contaminación. Esto provoca un sabor amargo, sarro o daños en los electrodomésticos.
Es por eso que las familias modernas recurren a sistemas de filtración por ósmosis inversa (OI) Para una filtración precisa.

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